El presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco, en una reciente entrevista indicaba que «somos el primer país del mundo en deporte«. De hecho son millones los españoles que siguen los pronóstico de apuestas deportivas de las distintas competiciones.
Según el presidente del COE este ranking no es por el número de aficionados, ni de resultados, habrá que calcularlo teniendo en cuenta el ratio resultados-inversión, «ya que el presupuesto que los países que nos rodean dan a las federaciones en un año es el doble del que tenemos en España en cuatro«.
De estas afirmaciones se desprende que las aportaciones al deporte por parte de las instituciones están lejos de las de los países con mejores resultados en las Olimpiadas.
A diferencia de otros países, el deporte español está escasamente financiado tanto por organismos gubernamentales como privados. Existen países donde el deporte escolar y su perfeccionamiento en el deporte universitario es la base de muchos de los logros. Son muchos ya los jóvenes españoles que para perfeccionar su alto nivel deportivo deben emigrar a universidades norteamericanas para poder competir con los mejores del mundo.
La familias de tenistas, golfistas como Jon Rahm, atletas, pilotos y otros deportistas individuales no son capaces económicamente de financiar las prometedoras carreras deportivas de sus hijos, por lo que gracias a becas obtenidas en universidades pueden mantener el nivel de sus entrenamientos sin hacer grandes desembolsos económicos.
La becas que las federaciones y empresas privadas a través del Plan ADO, únicamente permite mantener a los deportistas más cualificados, sin embargo, otros deportistas sin posibilidades de obtener estas becas se quedan sin poder dar el salto a la élite.
En los últimos años han surgido nuevas iniciativas desde el sector privado con objeto de fomentar el deporte y apoyar a los deportistas de élite o en edad de formación, como las de la UCAM, o en nuestra Comunitat, la Fundación Trinidad Alfonso con sus diversos proyectos inyectó al deporte en el año 2020 una inversión de 15,6 millones de euros.
En deportes colectivos más potentes económicamente como el fútbol este problema no existe, ya que son los clubs de fútbol los que invierten en los jóvenes jugadores para poder promocionarlos en sus primeros equipos o para generar importantes ingresos gracias a sus traspasos.
Como podemos comprobar en la web de apuestas de fútbol para hoy domingo son miles los encuentros de fútbol base que se disputan a lo largo del toda España, si bien gracias a los grandes ingresos que el fútbol genera en cuanto a traspasos, estos deportistas no solo pueden costear sus entrenamientos y formación en las mejores condiciones, si no que incluso ya con 15 o 16 años perciben unos ingresos y pueden tener una dedicación casí exclusiva.
Por tanto, de la palabras de Alejandro Blanco y de los hechos anteriormente descritos, podemos apreciar que los resultados en el deporte no están únicamente basado en el talento de los deportistas, si no que en un alto porcentaje es fruto de la inversión, en instalaciones, centros de alto rendimiento y en becas o ingresos para que los deportistas pueden dedicar el 100% de su tiempo a la práctica del deporte.