El mundo del deporte con su gran dependencia económica ha generado en los clubs deportivos una necesidad de profesionalizar sus estructuras en los tiempos actuales, ya que la gestión de un club abarca numerosas facetas y todas tienen su vinculación con la parcela deportiva.
Cada vez son más necesarios un abanico de conocimientos que solo los estrictamente deportivos, ya que la faceta organizativa del club, la gestión económica y financiera, gestión de marketing y comunicación, así como, recursos humanos, deben ser conocidas en profundidad. Esta premisa debe ser cumplida por cualquier profesional y más cuando se trata de deportistas, sin experiencia previa en gestión que deseen reorientar su trayectoria profesional una vez finalizada su carrera deportiva.
Es por ello que los ex-profesionales necesitan formarse mediante Másters de Gestión Deportiva y conocer más a fondo las diversas áreas que forman un club deportivo.
Son muchos los ex-profesionales del fútbol que han dado el salto desde el terreno de juego a los despachos, pasando a desarrollar tareas organizativas en clubs o federaciones al finalizar su carrera deportiva.
Dos exjugadores de fútbol han llegado a dirigir la Real Federación Española de Fúbol, después de abandonar la práctica activa del deporte, Ángel María Villar y Luis Rubiales.
Así mismo, dentro de la RFEF, en la actualidad, José Francisco Molina desarrolla la labor de Director Deportivo. Molina como jugador profesional de fútbol estuvo vinculado como guardameta a equipos como Valencia CF, Villarreal CF, At. Madrid, Deportivo de la Coruña y Levante UD, en el que se retiró en el año 2007. Siendo internacional con la Selección Española en 9 ocasiones.
Sus conocimientos y experiencia como jugador y posteriormente como entrenador le ha llevado al cargo de Director Deportivo de la Federación.
Otros casos de directores deportivos ex-jugadores profesionales en el fútbol español son Braulio Vázquez, ex-jugador y director deportivo tanto en el Valencia CF y actualmente en CA Osasuna; Rafa Alkorta,, jugador del Athletic Club y Real Madrid y actual director deportivo en el Athletic Club o uno de los más famosos por sus descubrimientos de promesas es Monchi en el Sevilla FC, director deportivo desde el año 2000, con un paréntesis de dos temporadas en la Roma.
Hasta hace pocos años, eran muchos los jugadores que encaminaban su trayectoria profesional fuera del mundo del deporte, siendo los cargos ejecutivos para personas formadas en otras disciplinas no deportivas.
En los últimos años esta tendencia está cambiando y no solo existe la opción de seguir vinculado al mundo del deporte dirigiendo un equipo como entrenador, hoy en día es habitual ver como deportistas intentan mantenerse ligados al deporte desde un punto de vista profesional, no tan vinculado a los resultados a corto plazo y buscan un desarrollo profesional desde un aspecto más organizativo y con una visión más global como club.
Como indica Jordi Cruyff, actual asesor deportivo en el FC Barcelona, la tarea del Director Deportivo debe ser una visión mas a medio y largo plazo, no pensar en el corto plazo. Para lo cual señala el hijo del mítico Johan Cruyff es necesario formar un buen equipo de trabajo alrededor, así como, entender a los jugadores pero proteger los intereses del club.
Actualmente, existen muchos clubs que optan por dar puestos de dirección y gestión a históricos jugadores del club, si bien el conocimiento y las habilidades como jugador no determina el buen hacer en su labor ejecutiva.
Es por ello que una visión empresarial del mundo del deporte necesita de ciertos conocimientos no aprendidos desde la práctica deportiva. Para lo cual los ex-profesionales necesitan una formación para disponer de conocimientos acordes a un deporte profesionalizado, conocimientos organizativos, financieros, legales, fiscales, marketing debe estar presentes en cualquier ejecutivo de cualquier club. Es por ello que los jugadores debe completar sus conocimientos con una visión más amplia que únicamente el aspecto deportivo.
